miércoles, 11 de febrero de 2009

Película de la semana: La ciencia del sueño

Escrita y dirigida magistralmente por Michel Gondry y estelarizada por Gael García Bernal y Charlotte Gainsbourg, La ciencia del sueño es una de mis películas favoritas. No solo por la belleza de la narrativa, que siempre serán tan sencillas y humanas dentro de las historias de Gondry, sino también por la manera de jugar con una película; eso es lo que verdaderamente transmite el director en sus películas, que él no está "trabajando", lo que uno ve en la pantalla es simplemente un extensión de su mente y lo que estamos viendo es un recuerdo, un sueño, una fantasía.


Stéphane, tras la muerte de su padre, regresa a Francia a vivir con su madre. Durante su estancia, él consigue un trabajo haciendo calendarios y en donde es terriblemente miserable, pues aquel tedioso trabajo lo impide crecer como artista y creador. A la par, en la narrativa, Stéphane conoce a Stéphanie, su vecina, de quien se enamora perdidamente. Creo que todos esperamos esa relación, pues desde el principio uno ve que están hechos el uno para el otro, pero aceptémoslo, un cuento de hadas de principio a fin no funciona en estos días, así que ya se imaginarán que sucede después. Y básicamente esta es la trama principal.


La ciencia del sueño, a parte de contar una linda historia entre dos personajes que fueron creados el uno para el otro, cuenta como sub-trama o narrativa secundaria el pequeño problema de Stéphane: no sabe distinguir la mayoría de la veces la realidad de la fantasía. Esa delgada línea entre el estar despierto y el estar soñando es practicamente inexistente en el personaje principal y será la causa y solución de muchos de sus problemas.


El estar en la mente de Stéphane es estar dentro de la mente de Gondry. Es una persona que le da mucha importancia a todo aquello que pensamos y soñamos. Nuestra mente es algo tan sumamente complicado que nos podríamos perder años y años tratando de explicar el por qué de las cosas. Pero se ve tan sencillo. Uno cierra los ojos y está en otro mundo, literalmente. Al soñar no existen los imposibles: tanto podemos volar y viajar de un lugar a otro con tan sólo pegar un brinco, como podemos platicar con la gente que se nos plazca. Valiéndose de efectos tan arcaicos e impresionantemente sencillos, Gondry seguramente logrará robarles ese aliento de admiración y adentrarlos en un mundo hecho para los soñadores, por un soñador. Los colores, las imágenes, el diseño de sets y la música, especialmente la música, todo esto los perderá en un mundo que jamás encontrarán mientras tengan los ojos abiertos.

Este director sigue los pasos de aquellos que marcaron una época en Francia con la Nouvelle Vague o New Wave, se vale de las enseñanzas que dejaron los maestros de aquellos tiempos e incorpora un aspecto aún más fresco, humano e incluso inocente, hasta ingenuo. Si aún no conocen el trabajo de este director, les recomiendo mucho que comiencen a seguir su trabajo, no se arrepentirán.

1 comentario:

Roxy dijo...

great movie!! La verdad si no hubiera sido por ti ranita nunca la hubiera visto! Desgraciadamente a la primera la vi incompleta, recuerdas ese dia? jajaja. Pero ya despues la termine de ver! Y me encanto!
Amo tus movie reviews!
de aqui a rolling stone froggy :P
love you!